En este artículo analizaremos las diferencias entre la separación y el divorcio. Esta es una cuestión común cuando surge una crisis en el matrimonio, como comunes son los errores a la hora de tomar una decisión entre separación o divorcio.
Si quieres prevenir estos errores y tomar una decisión con toda la información que necesitas, sigue leyendo.
¿Cuál es la diferencia entre separación y divorcio?
La principal diferencia entre la separación y el divorcio está en sus consecuencias legales. A través de la separación matrimonial quedarán sin efecto los derechos y obligaciones de los cónyuges, pero no se disolverá el matrimonio. En cambio, a través del divorcio se producirá la disolución definitiva del matrimonio.
A efectos legales, las diferencias son:
En la separación el matrimonio se suspende, mientras que en el divorcio se produce su disolución definitiva.
Si se opta por la separación matrimonial, el régimen de económico matrimonial pasa a separación de bienes. En cambio, en el divorcio se produce una disolución del patrimonio familiar.
La imposibilidad de heredar abintestato – sin testamento – se produce tanto en la separación como en el divorcio. Del mismo modo, se anula el derecho a la legítima.
Si se produce una separación legal, los cónyuges no podrán contraer matrimonio de nuevo al no producirse la disolución del mismo. En el caso del divorcio, los ex-cónyuges podrán volver a contraer matrimonio.
En ambos casos se deberá llegar a un acuerdo y ser plasmado a través de un convenio regulador. Este acuerdo deberá recoger todos los elementos de unión de la pareja, como son el cuidado de los hijos, guardia y custodia, régimen de visitas, pensión de alimentos, uso y disfrute de la vivienda y el ajuar familiar, disolución del régimen económico matrimonial, etc.
¿Cuándo es mejor elegir separación o divorcio?
Cuando te enfrentas a una crisis matrimonial es difícil tomar decisiones con la cabeza fría. Por ello, nosotros recomendamos la separación como punto intermedio entre el matrimonio y el divorcio. De este modo se puede producir un periodo de reflexión donde decidir qué hacer.
En la separación, todos los derechos y obligaciones del matrimonio quedarán sin efecto. Es decir, a efectos legales es como si el matrimonio estuviera disuelto. De este modo se puede producir un cese de la convivencia hasta tomar una decisión definitiva sin ser denunciado por abandono de hogar.
Pasado este periodo de reflexión, si se opta por la reconciliación bastará con comunicarlo al juzgado para reanudar el matrimonio con todos sus efectos. En cambio, si se decide poner fin al matrimonio definitivamente se podrá continuar con el proceso de divorcio.
¿Cuál es la diferencia entre estar separado legalmente y divorciado?
A efectos prácticos, no existe ninguna diferencia. Únicamente existe la limitación a la hora de volver a contraer matrimonio. Siendo imposible casarse de nuevo si se está separado legalmente al no haberse disuelto el anterior matrimonio.
Exceptuando la imposibilidad de contraer matrimonio de nuevo, las diferencias entre estar separado legalmente o divorciado no existen. Todos lo derechos y obligaciones de los cónyuges quedan en suspensión cuando se produce una separación legal.